Guía de viaje Pangani

Pangani es un pueblo encantador, fuera de las rutas turísticas habituales. Es uno de los destinos vacacionales favoritos de los tanzanos, ya sea al norte del pueblo o al sur, al otro lado del río, en la playa de Ushongo, a 16 km. La ciudad fue un importante centro comercial a partir del siglo XIV. Los persas y los árabes construyeron aquí estructuras de piedra de coral muy pronto, en la orilla izquierda del río Pangani, fácilmente navegable, lo que les permitía viajar muy al interior. Le encantarán las vistas (sobre todo al atardecer). En el siglo XIX, la ciudad era un importante punto de llegada de caravanas que transportaban marfil y esclavos a las islas de Pemba y, sobre todo, Zanzíbar, donde la ruta comercial continuaba por mar, principalmente hacia la península arábiga (Omán).Se instalaron colonos alemanes, sobre todo para establecer y desarrollar el cultivo del sisal. Fue la época dorada de la ciudad, que contó con un cine famoso en toda la región hasta su cierre en los años ochenta. La descolonización y la caída de los precios del sisal (ligada a la aparición de las fibras sintéticas) pasaron factura a la economía de la ciudad. Hoy, Pangani intenta resurgir de sus cenizas, pero sin recuperar su antiguo esplendor. Esperemos que algún día mejoren las carreteras de la región y sea fácil llegar a Pemba o Zanzíbar en barco. En la actualidad, el gobierno tanzano está acometiendo las obras necesarias para restaurar los edificios coloniales, convertidos en auténticas ruinas. Financiado con fondos de la embajada estadounidense, el primer lugar conmemorativo, el Centro del Patrimonio de Pangani, se construyó en 2015 en una antigua mansión del siglo XIX.Pangani está dividida en dos por el río del mismo nombre. La parte de la playa de Ushongo, al otro lado del centro, está más desarrollada y es más agradable para nadar, mientras que los balnearios del norte están muy aislados.