Un lugar paradisíaco en París que ofrece cocina mauriciana y platos exóticos.
A falta de estancia en las Seychelles que hacen tanto soñar, el Coco de Mer (la mayor nuez del mundo) te invita a descubrir toda la gastronomía de este pequeño rincón paradisíaco, en una decoración evocadora donde desfilan magníficas imágenes. No hay que coger un avión para encontrarse en la arena mientras comes comida mauriciana. Sólo falta el sol o las lámparas para tomar el sol y te lo puedes creer. Estamos tentados de deslizarse para hacer más realidad… Y en la base que del exotismo: budín criollo gratificado, dorada coryfeno cruda, botzoina con leche de coco. Es tan bueno como en los mares lejanos. Es realmente un aperitivo de vacaciones, tanto más cuanto que una zona de salón-playa en la terraza ha sido acondicionada especialmente para tomar el aperitivo, el digestivo o con la oportunidad de recibir amigos en privado (para 15 a 20 personas).
L’attente entre les plats était vraiment minime, tout était délicieux!
Je recommande ce restaurant.