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Liubliana, la capital de Eslovenia, es una ciudad animada y verde que combina el encanto de una pequeña capital con la estatura de una gran metrópolis europea. La ciudad tal y como la conocemos hoy, con sus riberas, sus pintorescos puentes y su mercado, fue modelada por el famoso arquitecto Jože Plečnik. Merece la pena visitar la Casa Plečnik, que alberga un museo dedicado al arquitecto; la Galería Nacional, que alberga la mayor colección de obras de arte de la Edad Media al siglo XX; el Mercado Central, donde los habitantes de Liubliana gustan de reunirse; el Puente de los Dragones, símbolo de la ciudad; y el Castillo de Liubliana, que ofrece una vista panorámica de la ciudad. Liubliana también es famosa por su ambiente alternativo y sus festivales de verano. Con sus numerosos espacios verdes y el río Ljubljanica, la ciudad ofrece muchas oportunidades para relajarse al aire libre. Tampoco hay que perderse la gastronomía de Liubliana, con platos tradicionales como los muslos de pollo fritos con trigo sarraceno. Liubliana es una gran ciudad para vivir, con multitud de actividades para todos los gustos.