LE PETIT SARLAT
En un entorno rural, una pequeña posada, abierta en mayo de 2005 por la familia Vanderdonckt y perdida en medio de los campos, ofrece un viaje gastronómico en el corazón del Périgord Noir. La decoración es encantadora y el pequeño jardín exterior le permitirá comer en todo momento a la sombra de un nodrizo bi-centenario. El trato es refinado y cálido. El hijo de la familia te guía con un amor seguro por sus productos. La carta de vinos es bien proporcionada y original… El otro hijo está a los fogones para tu placer: déjente probar con su foie gras de pato asado a las manzanas flambadas en Calvados, su magret de pato con salsa de morillas, acompañado de patatas sarladesas y verduras pequeñas, o su helado de nueces flamencas y armagnac. ¡Felicidad garantizada! Además de estos platos perecitos, otros sabores como el atún rojo, tomates, foie gras y crema de encender, la dorada real, salicornos, quinoa y col rave, o el pintadeau, sorbete de pimiento, berenjena y salsa de pimiento harán la delicia de tus papilas.
El restaurante también propone un servicio de tratamiento y expone a la venta algunos de sus productos emblemáticos - licores, mermeladas, vinos… En cuanto a los que habrían estado satisfechos con la comida hasta el punto de querer tomar clases, Le Petit Sarlat propone talleres de cocina cuyos temáticos varían de forma regular.