CASTEL MIMI
La historia de Castel Mimi comenzó cuando Constantin Mimi plantó las primeras vides importadas de Francia en el sitio en 1893. De origen greco-albanés, desempeñó un papel importante en el desarrollo de la viticultura en el país. Introdujo la uva Aligoté, que ahora está muy extendida en el suelo de Moldavia. Constantin Mimi estudió durante dos años en la Escuela Superior de Agronomía de Montpellier, aprendiendo sobre el cultivo de la vid y los métodos de elaboración del vino. En 1901, hizo construir una casa solariega con arquitectura clásica inspirada en un castillo francés. El edificio es majestuoso, en dos niveles y está catalogado como un monumento histórico del país. En 1911, los vinos de Mimi participaron en la Exposición Internacional de Vinos de Turín, Italia, donde encontraron su lugar entre las producciones europeas. De 1913 a 1917, Constantin Mimi sirvió a la Rusia Imperial como gobernador de Besarabia. El Rey Carol II de Rumania visitó la finca en 1925 y nombró a Constantin Mimi como jefe del Banco Central de Rumania al año siguiente. Durante la era soviética y hasta la década de 2000, el complejo sufrió varias modernizaciones sucesivas. En 2011, se inició la restauración del castillo. Hoy en día, la finca utiliza procesos de elaboración de vino de última generación (cubas importadas de Europa Occidental y barricas francesas). Además de las visitas y las degustaciones, la finca ofrece un gran restaurante gourmet, un hotel en una de las alas del castillo y un spa.