Desde el aeropuerto al centro de la ciudad Guatemala

A menos que se proceda de México, lo normal es llegar al país por el aeropuerto La Aurora de Ciudad de Guatemala. Situado en la zona 13, está a sólo quince minutos en coche de las zonas 4 y 10, donde se aloja la mayoría de los viajeros.

Del aeropuerto al centro de la ciudad. Aunque es posible llegar en autobús, le aconsejamos que pida un Uber, que es más rápido, seguro y, por cierto, más barato: cuesta unos Q40 (4,60 euros). Si no dispone de la aplicación, que puede descargarse en el wifi gratuito del aeropuerto, tomar un taxi es una buena alternativa, aunque más cara. En este caso, pida al personal una estimación de la tarifa y póngase de acuerdo con el conductor antes de subir al vehículo.

Del aeropuerto a Antigua: hay quien se salta la capital y va directamente a Antigua, su encantadora vecina. También en este caso, coger un Uber ofrece la mejor relación calidad-precio: 45 minutos por Q150 - 17,30 euros. Como alternativa, los hoteles y albergues juveniles suelen ofrecer un servicio de transporte, que debe reservarse con antelación.

Llegada en barco Guatemala

Lanchas : inevitables cuando se está a orillas del lago de Atitlán o del río Dulce, estas embarcaciones a motor transportan a lugareños y turistas por igual. Como es lógico, las tarifas las fija el cliente. Sin embargo, hay un truco para evitar el precio "gringo": no preguntes el coste del viaje antes de subir a bordo. Pregunte antes en la recepción de su albergue juvenil u hotel, y sólo entregue el dinero al bajar, con gesto confiado si es posible. Cuidado: asegúrate de dar la cantidad exacta, de lo contrario puede que no te den cambio.

Transportes compartidos Guatemala

El transporte público está bastante desarrollado en Guatemala, pero cuidado: ya sea por carretera o por agua, las redes son cambiantes y están sujetas a diversos peligros. Los horarios y tarifas que figuran en esta guía son, por tanto, meramente informativos. Una vez allí, no dude en pedir información actualizada en su hotel o albergue.

Las "camionetas", que recorren todo el país, son el medio de transporte local por excelencia. Sin embargo, según algunos guatemaltecos, son peligrosas, o al menos demasiado peligrosas para que las utilicen los turistas. La razón: el número de accidentes que se registran cada año y el riesgo de ser atracado o incluso asaltado. Esta no es nuestra experiencia, ni la de los viajeros que hemos conocido, pero lo cierto es que viajar en chicken-bus puede llevar mucho tiempo y ser agotador. Por ejemplo, llegar a Chichicastenango desde Panajachel, en el Altiplano, sólo llevará entre 1 hora y 30 minutos y 1 hora y 45 minutos en coche o en lanzadera, las lanzaderas colectivas que proporcionan los alojamientos y las agencias de viajes o excursiones. No se puede llegar directamente en camioneta: hay que subir a tres vehículos, lo que supone un trayecto más largo y tiempos de espera inevitables. Sin embargo, el precio juega a su favor: para Panajachel-Chichicastenango, sólo tendrás que pagar Q5, Q3 y Q6 respectivamente por cada pollo-bus en el trayecto de ida, frente a un viaje de ida y vuelta que cuesta al menos Q175 en lanzadera. Así que la tranquilidad tiene un precio, al igual que la comodidad. Si los asientos y la suspensión de las lanzaderas ya son poco amables con la espalda, las camionetas deberían ser evitadas por las personas que sufren todo tipo de dolores. En resumen, los chicken buses son perfectamente adecuados para los viajeros de larga distancia que sean curiosos, ligeramente aventureros y estén en buenas condiciones físicas. Dicho esto, sería una pena perderse esta inmersión en la Guatemala típica, incluso para los que tienen prisa. Nuestro consejo: tome una camioneta una vez -si es posible- para un trayecto corto que no implique cambios, y siéntese en el centro, con los asientos delanteros y traseros que parecen barcos de montaña rusa. Por último, pregunte a los lugareños dónde y cuándo bajarse; estarán encantados de indicarle la dirección correcta.

Pick-ups: familias enteras suben a bordo. Permanecen erguidas, hacinadas en la parte trasera abierta del vehículo para recorrer distancias que a veces requieren una hora de trayecto. Un medio de transporte original, cuando menos, y práctico en las zonas rurales. Las paradas no están claramente indicadas, así que hay que preguntar al conductor o a los pasajeros. A la hora de pagar, haga como ellos para asegurarse de que no le toque la tarifa "gringa".

Lanzaderas : aunque no son tan baratas como los chicken buses, las lanzaderas pueden ahorrar una cantidad considerable de tiempo. Con horas de salida fijas que varían según el destino, las lanzaderas se pueden reservar directamente con los albergues juveniles el día anterior para el día siguiente, aunque es posible reservar con unos días de antelación para mayor tranquilidad. No obstante, lo mejor es comparar sus precios con los de las distintas agencias de viajes o excursiones que encontrará en la zona. No hay ninguna regla: a veces los precios son más bajos, pero no siempre es así.

Autobuses "clásicos": más cómodos que las camionetas, estos autocares ofrecen precios y duración de trayecto similares a los de las lanzaderas. Por si acaso, no dude en comparar, sobre todo a través de la página web Bookaway (www.bookaway.com). Una vez más, no es necesario reservar con demasiada antelación: puede hacerlo uno o dos días antes de la salida, en la página web de la compañía o en la sucursal más cercana. Las principales son Maya de Oro (https://mmcorporacion.com), para viajar por el Petén, Monja Blanca (www.tmb.com.gt), que opera entre Ciudad de Guatemala y Cobán, y Litegua, que cubre el este del país desde la capital. Sea cual sea su destino, asegúrese de que el aire acondicionado está encendido al máximo: lleve varios jerseys, pantalones y calcetines gruesos.

Con conductor Guatemala

Al igual que ocurre con el transporte público, la red de taxis y VTC está muy desarrollada en Guatemala. Uber, en particular, es la forma más práctica de moverse por la capital y descubrir los alrededores de ciudades como Antigua. Además, las tarifas son más baratas que las que cobran otros conductores: cuente Q60 -unos 7 euros- para ir de la zona 1 a la 10 de Ciudad de Guatemala. Sin embargo, no encontrará vehículos en todo el país; en algunas partes no hay ninguno, como en los pueblos de los alrededores de Quetzaltenango. Por eso, cuando se viaja fuera de las zonas urbanas, es mejor llamar a un taxi -de color amarillo- o a un VTC a través del albergue juvenil o el hotel, para acordar el precio de antemano. Para distancias cortas, basta con tomar un taxi en la cabecera de la estación o subir a la parte trasera de un tuk-tuk, los mototaxis de tres ruedas importados de Asia.

En coche Guatemala

Por supuesto, alquilar un coche permite descubrir el país a su ritmo y tomarse tiempo para contemplar sus bellos panoramas, pero no es ni mucho menos necesario para disfrutar de unas buenas vacaciones, sobre todo porque hay varias normas de seguridad que conviene tener en cuenta. En primer lugar, desaconsejamos encarecidamente conducir de noche. Las carreteras pueden ser peligrosas, sinuosas y mal iluminadas. Los guatemaltecos no son famosos por la calidad de su conducción, así que cuidado, cuidado y cuidado. Por último, no se fíe de los tiempos de viaje que indica Maps, ya que algunas carreteras son intransitables en la realidad. También tendrá que armarse de paciencia a la hora de aparcar en las principales ciudades, como Ciudad de Guatemala, Antigua y Quetzaltenango. Si aún así desea disponer de vehículo propio, es aconsejable utilizar sitios como Rental Cars para comparar los precios de las agencias de alquiler, entre las que destacan Alamo, National y Avis.

Accesibilidad Guatemala

Con sus aceras altas, estrechas e irregulares y sus calles empedradas, Guatemala no es un buen ejemplo de accesibilidad para las personas con movilidad reducida y los carritos de bebé. Lo mismo ocurre con el transporte público: aparte de los vehículos privados, desplazarse puede ser complicado.

Atrapa turistas Guatemala

Una regla de oro: no te fíes de los vendedores ambulantes, aunque sólo sea para comprar una tarjeta de transporte en Ciudad de Guatemala. Sin embargo, tenga cuidado de no confundirlos con los ayudantes de los conductores de los chicken-bus o pick-ups, cuya función es gritar el nombre de su destino, y que seguramente le preguntarán a dónde va. Otro consejo: no llame a los taxis en la calle. Tome sólo los que están en la cabecera de la estación, o haga que le llamen desde su albergue, hotel o el restaurante en el que acaba de comer.