A pocos minutos de Argenton-sur-Creuse, el Petit Roy es un buen lugar. En primer lugar, el entorno es relajante, la terraza exterior de 100 metros cuadrados se encuentra justo al borde de la Creuse, escondida en un espacio verde. En verano se organizan conciertos (jazz manouche, swing botte, canción francesa, hard rock.) y la cena toma aires de fiesta cuando no se solicita ningún suplemento. En el interior, el espacio es luminoso, acogedor y funcional. A la pizarra, una amplia selección de carnes fundidas y pescados sublimados por especias dulces y sabores florales. Uno de los secretos de Robert Detilleul, el chef de este restaurante, es la cocción baja temperatura que le enseñó Joël Robuchon. Esta técnica le permite esperar al cielo, conservar todos los sabores y preservar sobre todo todas las cualidades nutritivas de sus productos. Los productores locales se solicitan y los platos son deliciosos. Pequeño inconveniente para los postres, menos finalidades que el resto del mapa.
Opiniones de los miembros sobre LE PETIT ROY
Repas correct mais serveurs totalement dépassés, ils ne savent même pas les numéros des tables!!! Ils sont perdus dans le service, on assiste à un ballet désordonné de serveurs avec des plats qui passent et qui repassent . Ils se tiennent la tête...
Le summum, c'est quand même un chat un peu douteux qui se promène dans la salle restaurant, pas très top pour un restaurant de ce niveau.
Ils s'occupent bien de leur clients, je recommande à 100%.