Cantina en París que ofrece una pizza con masa fina y productos de la bota, una carta de carnes y productos de temporada.
La Cantina di Luca, cerca de la torre Eiffel, destaca los sabores italianos con brio. Aquí la pizza es reina: harinas especiales, 4 días de fermentación, levadura natural y agua destartrada, horno Morello para una cocción uniforme al fuego de madera… Con su pasta fina y sus productos de la Botte seleccionados en la parte (gorgonzola, parmesano, ricotta, jamón de Parma, salami picante, etc.), se puede degustar entero, in situ o para llevar. Los recetas suelen ser originales y bien encontrados, como la "Pretenzioso", sin pretensiones, pero con queso de cabra y nueces. A la carta, antipasti clásicos, carpaccio, bruschetta, prosciutto di Parma, pasta tradicional, gnocchi, escalope de ternera a la milanesa, risotto a los productos de temporada (espárragos y parmesano, alcacros y jamón crudo, vieiras y cítricos, y otros platos soleados (atún a la plancha), suprema de aves de corral y su compotada de cebollas y pimientos rojos. Un ineludible al postre: los "perfiles de la cantina" con la posibilidad de elegir su helado (vainilla, caramelo, chocolate, café, pistacho, fresa). En cuanto al ambiente, la decoración arbolada y luminosa es acogedora. El servicio está atento y no dudarás en hacerte algunos chistes, especialmente en relación con los nombres de las pizzas, a veces bastante iconoclastas… Puedes probar un cóctel a la carta si te apetece ir a la mesa un poco al final de las comidas, ya que son muy logradas.
Pour un repas sur la pause déjeuner c'est compliqué.
Sinon c'est très bien et très bon comme toujours.