LE RELAIS NOTRE-DAME
A pocos pasos del famoso Museo de la Prehistoria, de las Gargantas del Verdon y de sus lagos de Sainte-Croix y Esparrón, esta magnífica y auténtica casa de campo provenzal, un verdadero relevo de encanto con sus grandes árboles, está enclavada en el corazón de viñedos, lavandas y olivos. Un entorno excepcional! Dirigido por la familia Berna desde 1952, este establecimiento es el lugar ideal para los amantes de la calma y el relax. Su ambiente colorido, su decoración refinada y refinada, su piscina climatizada fuera de temporada que permite bañarse durante toda la temporada de apertura del establecimiento, su solarium, su agradable jardín ajardinado.... todo rima aquí con serenidad y descanso. Sus 13 habitaciones, con su auténtica decoración, recuerdan los esplendores de la Provenza y son de un confort impecable. Para comer, se sentará en la hermosa terraza bajo los plátanos o en la habitación con sus mesas bellamente dispuestas en un ambiente de elegancia y refinamiento. El plato revela una cocina regional que es a la vez sabrosa, generosa e ingeniosa. Entre las sugerencias del momento (el menú varía según las estaciones y los mercados), se puede degustar la brouillade con trufas, pechuga de pato, guiso de jabalí, guiso de liebre o incluso estos pies y paquetes que ganan todos los votos. Hay que tener en cuenta que los vegetarianos no son olvidados. Todo esto acompañado de una hermosa carta de vinos.
Opiniones de los miembros sobre LE RELAIS NOTRE-DAME
Their foie gras is fait-maison and the escargot is a must-order item! For the plat, we ordered the grilled octopus risotto and duck breast with vegetables. The octopus was grilled to perfection with a tender and succulent texture! Highly recommend this hotel and restaurant!
Die Lage des Hotel ist in unmittelbarer Nähe zur "Gorges du Verdon" ein absolutes Highlight in der Provence.
Gerne hinterlassen wir auch hier unsere sachliche Kritik:
Das Familienzimmer, in dem wir übernachtet haben, war sehr klein und beengend. Die Betten waren extrem schlecht (billige Matratzen!). Hinzu kam der Verkehrslärm in der Nacht. Die Fenster sind nämlich direkt zur Strasse.
In beiden Zimmern roch es muffig, marode und abgestanden.
Der grosse Garten lud zum Verweilen und Entdecken ein. Er wirkte aber leider da und dort auch ungepflegt.
Das Frühstück kann unter Sonnenschirmen auf einer kleinen Terrasse eingenommen werden. Das hat uns gefallen.
Das Essen war für ein *** Stern Relais okay, aber mehr nicht. Uns fehlten ein paar Speisen.
Das internationale Personal beim Frühstück ist sehr freundlich und hilfsbereit. Herzlichen Dank!
Leider lässt sich das vom mürrischen und extrem unfreundlichen Chef des Hauses nicht sagen. (Siehe seine Antworten auf jegliche Kritik! Ein absolutes No-go!)
Fazit: Das Preis-Leistungsverhältnis stimmt hier nicht. Oder wie sagt man so schön? "Einmal und nie wieder"!