LA BASTIDE DU CALALOU * * * *
Cómo llegar y contactar
Excepcional destino de vacaciones cerca del Verdon, este hotel-restaurante de 4 estrellas ofrece lujo y confort en un entorno natural.
A los pies del pueblo y a dos pasos del Verdon, la Bastide du Calalou es un remanso de confort, una joya sin igual que combina lujo, modernidad y tradición. En un parque de 4 hectáreas, podrá alojarse en suntuosas habitaciones de estilo tradicional provenzal y amplias estancias. Una acogida atenta y personalizada. El desayuno, abundante y variado, se sirve en el comedor o en la terraza. La mesa está orquestada por el chef Patrick Rivière.
Para más información
Información y horarios en LA BASTIDE DU CALALOU
Etiqueta ecológica europea. Abierto del 15 de marzo al 31 de octubre. 32 habitaciones (pisos La Petite Bastide y La Bergerie de 350 a 700 euros por noche). Habitación doble de 150 a 315 euros; suite de 245 a 345 euros. Desayuno: 20 euros (niños 10 euros). Aparcamiento incluido. 2 habitaciones con acceso PMR. Se admiten animales. Wifi gratuito. Restaurante ("La table du Calalou" ofrece menús a partir de 46 €). Seminarios, bodas. Pista de tenis y zona de petanca. Televisión por satélite. Zona de bienestar.
Mensaje del propietario
Seducidos por esta región de Provenza, por esta auténtica casa y su suntuoso entorno, los propietarios del lugar y atentos anfitriones, han imaginado en este elegante marco, un lugar sencillo y sincero..
En la Bastide du Calalou, esta familia, profesional de la hostelería, cultiva con pasión el placer de recibir a diario a sus huéspedes y mantiene el estilo de vida apacible que reina en las distintas habitaciones y suites, en la pequeña bastida y el aprisco, en el restaurante, el bar y el parque. La promesa de una estancia para evadirse y reencontrarse con uno mismo, en una residencia con encanto donde reina un espíritu familiar.
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Opiniones de los miembros sobre LA BASTIDE DU CALALOU
La piscine était chaude, agréable. Une détente assurée.
Un cadre tellement agréable, où le dîner est servi sous les oliviers.
On ne peut s'empêcher d'y venir et revenir....