A LA BONNE HEURE
La marca Casino ha dado un impulso a la tradicional cafetería, un poco triste, de centro comercial. El espacio XXL está dividido como en casa: salón acogedor, comedor acogedor, terraza agradable, mesas largas que compartir, jardín de juegos para los niños. En el medio, reina la cocina y sus islotes de entrada y postres en modalidad buffet a voluntad. No hay chichis porque uno se sirve a sí mismo, pero sí un personal más bien educado y discreto. Ese día se ha adornado la base de ensaladas de todo tipo que se asolan en las numerosas salsas, especias y aromatos a nuestra disposición. En cuanto al plato caliente, hemos optado por un jamón caliente correcto, acompañado de patatas salteadas y de una mertatuola floda. Al final de la comida, un pequeño paseo por los dulces nos permite pintar nuestra propia cafetería gourmet con tiramisú con frutas exóticas, mousse de chocolate y perfecto con limón. Si el lugar impone su estilo Ikea, sus grandes espacios depurados, su mobiliario sobrio y de diseño, se desprende de aquí un pequeño sabor de hecho a la cadena pero repus por menos de 11 euros.
Pour une escale sur un parcours très encombré nous avons trouvé un coin tranquille et apaisant
Le repas classique et bien préparé un buffet très bien garni
Vraiment un bon moment bravo