Encabezando la lista de las principales atracciones turísticas de Romala visita al Coliseo Le invitamos a descubrir todos los detalles que le ayudarán a disfrutar de una visita a este lugar imprescindible de la capital italiana.
La visita al Coliseo es una de las mejores cosas que hacer en Roma, sea cual sea el tipo de visita que elija y la época del año. Le recomendamos que lea el siguiente artículo para conocer todos los elementos importantes de esta experiencia: el tiempo necesario en el lugar, el precio de las entradas y todo lo que no debe perderse durante su visita.
El horario de apertura del Coliseo Romano es bastante amplio, ya que el recinto abre todos los días de la semana de 8.30 a 19.00 horas . En invierno, el horario se reduce de 9.00 a 17.30 horas. Además, el recinto permanece abierto todo el año, excepto en caso de obras de restauración del monumento.
¿Hay visitas guiadas al Coliseo y merecen la pena?
El Coliseo romano es un lugar ideal para visitar con un guía experto, debido a la trayectoria histórica del monumento. Existen varias alternativas visitas guiadas al Coliseo. Es posible elegir criterios como la hora, la duración o incluso la combinación de esta visita con otros monumentos de Roma.
Las mejores visitas son aquellas para un grupo relativamente pequeño de personas. También es aconsejable elegir visitas guiadas que le permitan bajar a la arena y a las partes subterráneas del edificio. Esta opción le permitirá ver las partes del Coliseo donde se celebraban las batallas de gladiadores y donde se organizaban otros espectáculos de la época romana.
¿Cómo llegar al Coliseo desde otros lugares de Roma?
Es bastante fácil llegar al Coliseo desde otros puntos de la ciudad. El monumento emblemático de la Ciudad Eterna se encuentra en el centro histórico. Por tanto, está muy bien comunicado con otras zonas como la Ciudad del Vaticano, los alrededores de la Piazza del Popolo o el barrio de Trastevere.
La estación de metro Colosseo, de la línea azul, está a sólo cien pasos de la entrada del Coliseo. Por tanto, es fácil llegar al Coliseo desde todas las zonas con acceso en metro.
Las líneas de autobús 117, 175, 186, 271, 53, 571, 53, 571, 75, 80, 810, 85 y 87 son otra opción, especialmente para las zonas sin estación de metro y fuera del centro histórico de Roma.
Por último, caminar es siempre la mejor alternativa: es una forma excelente de explorar las hermosas calles de la ciudad.
¿Cuándo es el mejor momento para visitar el Coliseo?
El Coliseo romano es una de las principales atracciones turísticas de la capital italiana, por lo que está abierto todo el año. Sin embargo, hay ciertas épocas del año más adecuadas que otras para una visita más pausada.
Elinvierno y el otoño son las mejores épocas para visitar el Coliseo. En primer lugar, al haber menos turistas, podrá visitar las tribunas, las arenas, los pasadizos subterráneos y los alrededores del Coliseo sin tener que enfrentarse a cientos de turistas.
También hay que tener siempre en cuenta que el Coliseo tiene grandes zonas sin sombra. El calor sofocante del verano en Roma puede hacer que su visita al Coliseo sea menos agradable en esta época del año. En cualquier caso, una buena forma de evitar las aglomeraciones y las temperaturas extremas del verano es visitar el Coliseo a primera hora de la mañana. No olvide comprar las entradas con antelación para asegurarse un asiento.
Existen varios consejos para aprovechar al máximo la visita al Coliseo romano. Puede optar por una visita guiada que incluya el Palatino, el Foro y el Coliseo. Es muy recomendable visitar estos lugares con un guía turístico, que se asegurará de que aprenda todo lo posible sobre su importancia y cada etapa de su larga existencia.
Otra recomendación es optar por el transporte público, especialmente el metro, si tiene que llegar al Coliseo por su cuenta. No tiene sentido gastar dinero en taxis o transporte privado cuando los trenes subterráneos de la ciudad le llevarán al Coliseo desde otras zonas turísticas en un tiempo récord.
Por último, elija otra zona de la ciudad para desayunar, comer o cenar. Al tratarse de una zona muy turística, los restaurantes de los alrededores son bastante caros y distan mucho de ser excelentes.
Por último, si va al Coliseo en verano, no olvide protegerse del sol. Las temperaturas pueden llegar a ser sofocantes en Roma.