CARRERA DE FERTŐRÁKOSI (KŐFEJTŐ FERTŐRÁKOSI ÉS BARLANGSZÍNHÁZ)

Estas antiguas canteras, ya explotadas por los romanos, parecen un templo troglodytico de la antigua Egipto. Parte de los bloques de arenisca extraídos sirvieron para construir casas en Viena, Austria. Los acantilados, de unos diez metros, están incrustados de fósiles marinos que datan de unos cuantos millones de años. La acústica en estas inmensas salas es tan fabulosa que se ha acondicionado un teatro lírico con capacidad para 850 personas. Las carreras de Fertőrákos se han convertido en la escena más popular del festival de Sopron y forman parte del patrimonio mundial de la humanidad con el lago Fertő.