MOCĂNIȚĂ
Se trata de la última línea de ferrocarril forestal aún en uso en Europa. Este ferrocarril de vía estrecha, que entró en servicio en la década de 1930, recorre 50 kilómetros a través del magnífico valle de Vaser, al que solo se puede acceder por este medio. Se utiliza para llevar a los aduaneros y los madereros a su lugar de trabajo y, a la vuelta, para transportar la madera hasta Vișeu. Los turistas también pueden recorrer los 21,6 kilómetros del trayecto en vagones de época tirados por locomotoras de vapor (mocăniță) o diésel. Las vistas sobre el valle, salpicado de gargantas, crestas, túneles y cascadas, son espectaculares. Hay varias paradas en el camino. En Paltin, la última estación, permanecerá entre 1 y 2 horas, tiempo que puede aprovechar para disfrutar de un pícnic o una barbacoa, y dar un breve paseo por el bosque. El tren circula desde finales de marzo hasta mediados de noviembre (de jueves a domingo; todos los días de junio a finales de septiembre): la salida es a las 9 h y el regreso alrededor de las 15 h. El mocăniță también circula en Navidad y Año Nuevo. Con la nieve, el ambiente es mágico.
En el aparcamiento de la estación podrá admirar un conjunto de casas tradicionales de Maramureș (Satul Maramureșean Mocănița). En el lugar se venden productos locales y a veces se organizan eventos folclóricos.
La estación también dispone de un pequeño café llamado Elefant, ubicado en una casa judía tradicional que hace las veces de museo.
Las caravanas y autocaravanas también pueden aparcar aquí (parking de pago).