HOTEL MANCARRÓN
La estructura más cómoda del archipiélago (y también la más cara) con unas vistas magníficas del agua. En medio de la propiedad se cruzan aves, iguanas y agoutis. Algunas habitaciones son sencillamente inmensas, equipadas con ventilador y cuarto de baño privado. Se han realizado esfuerzos encomiables para rehabilitar esta antigua fábrica de madera, que posteriormente se convirtió en un centro comunitario, dejando un poco al abandono de los antiguos propietarios hasta hace poco. El establecimiento está muy bien organizado para los circuitos (visita de la reserva Los Gatuzos). Hoy en día, nos gusta humar el aire del tiempo, lodo en una hamaca. Las comidas son excelentes y los platos bien presentados, una cocina sencilla y sin florituras (muy buenos platos de pescado). La flora y la fauna son únicas en este archipiélago, un placer para el alma y el cuerpo.