JUMA MASJID - MEZQUITA DE LOS VIERNES
Desde el exterior hay poco, o nada, que sugiera la grandiosa naturaleza de la mezquita de los Viernes. La monotonía de una larga pared ciega se ve interrumpida por una imponente puerta doble de madera finamente trabajada. Domina el conjunto un esbelto minarete de 33 metros de altura. El interior es más que sorprendente: un bosque de columnas de madera tallada soporta el techo de la mezquita. Cada pilar parece tener su propia historia, y una de las más famosas es la que proviene de la India. Su decoración es abstracta, como requiere el islam, pero se puede adivinar una representación humana.
Si dedica tiempo a contemplar las diversas ornamentaciones, podrá descubrir símbolos zoroastrianos, representaciones de Buda, etc. Los ricos peregrinos o comerciantes que llegaban a Jiva a veces ofrecían a la mezquita una columna tallada al estilo de su ciudad para sustituir a otra columna que fuera demasiado antigua. Las más antiguas, unas quince, datan de los siglos X y XI. En total, la mezquita tiene 213 columnas, todas de diferentes épocas y con distintos motivos decorativos. Algunas provienen de otros edificios y tuvieron que ser alargadas o acortadas. Se apoyan sobre una base de mármol esculpido que les proporciona estabilidad y las protege de la humedad del suelo. La arquitectura de la mezquita de Juma corresponde al estilo arcaico de las primeras mezquitas, que eran lugares de reunión. Aquí se hablaba del Corán, pero también se discutía sobre otros temas relacionados con la organización de la vida social de los creyentes. El mihrab está situado en el centro de la gran sala, de 55 metros de largo y 45 de ancho. La luz entra por dos aberturas octogonales situadas en el techo. Después de una reciente y desafortunada restauración, las aberturas de vidrio del techo fueron cerradas y reemplazadas por farolas.
Reserve las mejores actividades con Get Your Guide
Opiniones de los miembros sobre JUMA MASJID - MEZQUITA DE LOS VIERNES
(attention, ce n'est pas celui de cette mosquée), la montée se fait par un escalier sombre très très étroit, aux marches irrégulières... A ne pas manquer!
Il y a un 2, 3 bancs où il est bon de faire une pause
à voir absolument et avec tous les détails que peut donner un guide local on devrait en ressortir plus tolérant
c'est une mosquée atypique par son architecture dans un pays où les monuments avec céramique et majolique prédominent ...