EL APARTAMENTO-MUSEO DE PUSHKIN
El museo ha sido completamente restaurado para el centenario del nacimiento del poeta. Moscú y San Petersburgo están arrebatando el legado del gran Pushkin. Aunque la actual capital rusa fue su lugar de nacimiento, San Petersburgo, a la que su obra está íntimamente ligada, no le trajo realmente suerte: fue en esta mansión en el muelle del Canal de Moika donde el gran escritor ruso pasó los últimos cuatro meses de su vida, a partir de septiembre de 1836. Una existencia trágicamente interrumpida por un duelo con G. d'Anthès, que cortejaba asiduamente a su esposa. A pesar de esta corta estancia, el museo que alberga este edificio es rico en muchos recuerdos relacionados con Pushkin, pero también con los grandes nombres de la historia rusa: la antigua casa estaba efectivamente habitada por Biron, uno de los favoritos de la emperatriz Ana Ioannovna en el siglo XVIII.
Pushkin, un verdadero dios que vive en Rusia, donde es a la vez el mejor escritor y una especie de padre fundador de la nación, sigue moviendo a las multitudes que se agolpan religiosamente en este museo de apartamentos. Otro signo del fervor, ya evidente en vida, es la nota de su médico en la puerta de la escalera que informa a sus admiradores de su estado de salud. El museo es más interesante con un guía, que narra apasionadamente los últimos días de la vida de Aleksandr Sergeyevich: la insultante carta recibida de d'Anthes, el fatídico duelo en una mañana de enero, la agonía en el sofá del dormitorio.
El vestíbulo, el comedor, la sala de estar, el dormitorio, el estudio y la habitación de los niños han sido reconstruidos con una notable preocupación por la autenticidad de los muebles y las posesiones que pertenecían a la familia Pushkin. Se conservaron algunos objetos queridos por el poeta: retratos de sus cuatro hijos y algunos amigos, una copia de los cuentos de Charles Perrault, su bastón, sus pipas, su pluma... Acribillado por las deudas, el poeta no conocía el lujo, si no el de una biblioteca con 3.000 libros. Se detendrá con emoción frente al escritorio donde escribió sus últimas obras, como lo atestiguan algunos de sus manuscritos exhibidos en la sala, frente al sofá donde respiró por última vez y frente a su máscara de la muerte, guardada en el museo junto a un medallón que contiene un rizo de su cabello, recogido por Turgenev. Cada año, el 29 de enero, el museo rinde homenaje al escritor organizando el "Día de Pushkin".