CRUCERO EN LA BAHÍA DE DISKO

Ilulissat vive al ritmo de su puerto, con barcos pesqueros y turísticos serpenteando entre el hielo. Sobrevolar el glaciar Sermeq Kujalleq ofrece una vista única de la zona de ruptura donde los icebergs calan y se acumulan en el fiordo de 60 kilómetros, mientras que navegar desde Ilulissat hasta la boca de la bahía permite contemplarlo más de cerca. Tanto gigantismo, las diferentes formas, el blanco deslumbrante y el azul luminoso, fascinan y asustan desde los primeros crujidos que sugieren lo peor. Lo más habitual es ver cómo enormes bloques se desprenden de las partes más verticales, cayendo con gran estrépito y creando enormes olas. Pero el equilibrio es precario y la rotura puede ser más profunda. Un iceberg desequilibrado puede cambiar fácilmente su centro de gravedad y su línea de flotación. Las manchas negras que pueden verse en el hielo son en realidad partes del iceberg que han rozado el fondo del fiordo y que, debido al movimiento, se han encontrado al aire libre. Si hay líneas rectas características de las roturas, también hay formas redondeadas, cambios de textura, algunos arcos, cavidades... todo ello es el juego de las corrientes de agua alrededor de los icebergs, la nieve caída que se ha introducido en las grietas con el paso del tiempo y los diferentes tipos de hielo más o menos comprimido. La creatividad de la naturaleza parece no tener límites. Cuando el sol pretende ponerse, el horizonte se ilumina y un espectáculo de colores asombrosos transforma el crucero. El azul, el amarillo o el rosa cobran protagonismo en función de la composición del iceberg: nieve más o menos vieja, hielo muy comprimido, hielo que ha estado en el agua... La posición del iceberg en el glaciar y la forma en que ha estado sometido a presión durante su vida como iceberg crean de forma natural este fenómeno, que parece irreal. El frío es intenso a medida que pasan las horas en el agua, pero la magia de los icebergs hace que todos los turistas permanezcan en cubierta para escuchar lo que los inuit llaman "el canto de los icebergs". Varios operadores turísticos, entre ellos Albatros Arctic Circle, World of Greenland, Arctic Friend e Ilulissat Adventure, ofrecen cruceros de un día, así como cruceros de medianoche (a partir de las 21.30), cuando los colores se vuelven increíbles con los flamantes reflejos del sol poniente en los gigantescos icebergs... ¡todo ello mientras se disfruta de una buena bebida a bordo! Una experiencia que no se puede perder.