PUB JACQUES-CŒUR
Para combinar el placer de salir con el atractivo cultural, el Pub Jacques-Coeur está todo indicado. En efecto, se trata de la casa natal de Jacques Coeur, clasificada en monumentos históricos. Huelga decir que el marco merece la pena. En el interior, las vigas de madera y las chimeneas están encantadas. Para los amantes de la cerveza, ocho estilos de presión compiten para seducir a los palacios sedientos (Loburg, Leff Royale Rubis, Kwak…). Las cervezas de botella también se proponen (Castel, Bud…). La elección no se detiene porque para los incondicionales de whisky, el abanico de opciones es amplio. En una velada no se puede probar todo. Por ejemplo, Lagavulin, Oban, Bowmore, Talisker, Chivas, y otros 10, 12, 14 y 15 años de edad. En esta decoración típica, podrás relajarte cómodamente en amplios banquetas o en boxes picando tapas para el aperitivo. El pub organiza famosas noches de años ochenta. En el sótano, una sala dispone de tres billares ingleses. Se paga el tiempo. Un lugar agradable para relajarse tras un buen día de trabajo. A mediodía, el establecimiento también hace restauración.