Los mejores alojamientos Pico

Desde las alturas de São João, esta bonita casa de huéspedes domina el paisaje: a un lado, una vista en picado del océano, al otro, Pico. Helena y Vera le darán una calurosa bienvenida y estarán encantadas de contarle todos los puntos de interés de la isla y servirle un delicioso desayuno en la terraza cubierta. Hermosas y confortables suites, algunas con bañera de hidromasaje, todas con aire acondicionado, TV y ropa de cama suave. Un verdadero pequeño paraíso.

Una opción maravillosa, rodeada de verdor y árboles frutales, con vistas al mar y a São Jorge. Aunque se encuentra en la punta de la isla, se accede fácilmente. Un trocito de paraíso perteneciente a una pareja franco-belga, Anne-Lise y Jeremy, que están presentes las 24 horas del día. Las cinco habitaciones están decoradas con buen gusto, en tonos marinos: azul, blanco y madera que invitan a dejarse llevar por el lejano sonido de las olas. También cuenta con una piscina privada. Posibilidad de comer en la casa (con reserva): sus papilas se lo agradecerán. Un escenario diferente donde disfrutar de la calma.

También en el puerto hay habitaciones sencillas, funcionales, bastante bien mantenidas, que disponen de salud privada, teléfono, televisión por cable y una zona de cocina (muy práctica). Un trato agradable y de calidad. Servicio de traslado al aeropuerto.

Casa solariega catalogada del siglo XVIIsituada en el puerto de São Roque do Pico, al pie de la montaña y a veinte metros del mar. Las vistas del puerto, del monte Pico y de São Jorge son magníficas. La casa de piedra tiene un cierto encanto que se ve subrayado por el refinamiento de la decoración: estilo inglés, con muebles de caoba y latón, telas con flores, recuerdos de viajes, mapas y barcos en miniatura.

Un albergue juvenil muy agradable en un antiguo convento con vistas a São Roque. Algunas habitaciones tienen vistas al mar. Si es un amante de la naturaleza, es el lugar ideal para pasear a pie o en bicicleta, nadar, pescar, etcétera. Podrá practicar todas las actividades en los alrededores. Aquí se encuentra una de las maravillas naturales de Portugal y el punto más alto del país: la imponente montaña de Pico. Un gran albergue, ideal para explorar la isla y conocer gente de todo el mundo.