CUEVA DE SUMAGUING (CUEVA GRANDE)
leer másEs una de las cuevas más grandes y populares de Sagada y se tarda unas 2,5 horas en explorar cada impresionante cámara. Por el camino también se obtienen magníficas vistas de las terrazas de arroz de Kapay-aw y se ven los ataúdes colgantes en las paredes rocosas. Cuidado: a veces el agua de la cueva puede ser bastante alta (hasta los hombros). Hay que tomar precauciones.
LOS ATAÚDES COLGANTES DE ECHO VALLEY
leer másMuchos filipinos acuden aquí los fines de semana porque los ataúdes colgantes son uno de los hitos de Luzón. Desde hace más de 2.000 años, los habitantes de Sagada practican un ritual funerario bastante singular. Aquí no se entierra a los muertos, sino que los ataúdes se cuelgan de los acantilados, ya que los espíritus tienen más posibilidades de llegar al más allá si se colocan en lo alto. Algunos ataúdes tienen más de un siglo. Cabe señalar que esta costumbre se está extinguiendo.
VALLE DEL ECO (ECO-TOUR)
leer másEste paseo propuesto por la oficina de turismo es una verdadera delicia! El programa incluye una caminata de tres horas a través del Valle del Eco, ataúdes suspendidos, el río subterráneo y las cataratas de Bokong.
OFFICE DE TOURISME DE SAGADA
leer másSe trata de una oficina de turismo muy útil. Coordinan las distintas asociaciones de guías acreditados y fijan los precios de las expediciones (así que seguro que te dan un precio justo si pasas por ellos). Hay varios paseos para descubrir la zona, por el Valle del Eco, los ataúdes colgantes, el río subterráneo y las cascadas de Bokong. Aquí también se paga el impuesto medioambiental a la llegada (50 PHP).
CUEVA DE BALANGAGAN
leer másEstá a una hora y media a pie del pueblo en dirección a Suyo y es popular por sus formaciones minerales, estalagmitas y estalactitas. Es posible conducir hasta Suyo y caminar 20 minutos hasta la cueva. La cueva de Balangagan fue en su día un lugar de enterramiento para las tribus Igorot, y aún pueden verse varios ataúdes cerca de la entrada y otros clavados en las estalagmitas. Recorrer las salas con un guía que le cuenta todas las leyendas locales asociadas al lugar es una experiencia interesante, pero no recomendable para los claustrofóbicos.