AGUJA DE PRONIO
La gran curiosidad de la bahía de Prony es, por supuesto, la aguja, que no tiene nada que ver con una formación coralina, sino que es el resultado de un resurgimiento de agua dulce. Esta gigantesca chimenea echa raíces a 38 metros de profundidad y se eleva 2 metros por debajo de la superficie del agua. Imagina una catedral mineral desde las profundidades. La calcificación es el resultado de la acción entre el agua dulce de los lagos y ríos y el agua salada de la laguna. El agua dulce se infiltra, se calienta y se eleva... Las agujas se elevan desde un brazo de la catedral, formando varias agujas en la parte superior, debajo de las cuales se ha excavado un agujero del que brota agua dulce. El agua dulce se mezcla con el agua salada y da la impresión de una mezcla turbia con dos compuestos de diferente densidad. La Aiguille fue descubierta oficialmente en 1873, cuando el carguero La Somme, que pasaba por Prony para cargar madera para la prisión, encalló allí. El barco estuvo varado allí durante unas cincuenta horas, y fue un aviso el que lo liberó de su pesada carga, poniendo así fin a su encallamiento.
Hoyes un lugar de buceo: el calor que desprende la cavidad no es del agrado de los peces que acuden aquí en gran número. La aguja no deja de crecer haciendo su ganga calcárea. Hay corales y peces. Verdadero reino de los bivalvos, el lugar es también un lugar de desove para las lochas en noviembre. También se podría decir que es una maravilla para todos los que pueden venir a bucear aquí...