Qué ver y hacer Gōra

Este parque está situado a poca distancia del funicular que conduce al monte Sōunzan. Se puede ver una mezcla bastante curiosa de plantas alpinas y tropicales.

Es sin duda uno de los sitios más visitados en Hakone. Se puede llegar en teleférico, ya sea desde la estación Tōgendai, en la orilla del lago, o desde Gōra.
A Owakudani también se le llama Ō-jigoku, el gran infierno, y uno entiende por qué cuando ve las fumarolas y los remolinos de vapores sulfurosos que emanan de él. Una vez que te bajas del teleférico, un fuerte olor a azufre te pica la nariz, y te enfrentas a un paisaje lunar. Las verdes montañas han dado paso a una tierra quemada cubierta de polvo gris y amarillento. Reina como el fin del mundo en Owakudani, apenas perturbado por el bullicio de los turistas (extremadamente numerosos en todas las estaciones).
Los huevos de Owakudani son casi tan conocidos como el propio volcán. Después de cocinarse en agua sulfurosa, las cáscaras de estos huevos se vuelven negras, de ahí su nombre: kurotamago. Se dice que comerlas alarga su vida en siete años y tal vez por eso son tan populares. Se pueden comer en todas las salsas, e incluso los postres están decorados con su color negro.

Tanto el "valle" de Owakudani como el lago Ashi que se encuentra debajo son el resultado del colapso del monte Kamiyama después de una poderosa erupción volcánica hace unos 3.000 años. El Museo de Ciencias Naturales de Owakudani, que se encuentra en el sitio, explica la formación geológica del área en detalle. Cuidado, la actividad volcánica es todavía regular, y esto ha llevado recientemente al cierre de los senderos alrededor de las fumarolas.