Gastronomía especialidades locales y vinos Lomé Y La Región Marítima

En Togossimè, que significa "mercado de Togo" en la lengua local ewe, el mercado tiene dos sectores, uno de comercio normal y otro de trueque, que se celebra todos los miércoles en Togoville (principalmente por la mañana). En cuanto al trueque, los productos de la tierra se intercambian por los del mar. En la entrada se encuentra el gran fetiche, al que hombres y mujeres llevan ofrendas y presentan sus deseos de bendición para el éxito de sus negocios. Durante el resto de la semana, el mercado nunca muere del todo, aunque se anima más tímidamente.

Popular entre las familias togolesas, el Festival des Glaces es una heladería, un salón de té con pastelería y un restaurante (snack bar y pizzería). En una gran sala climatizada con acuario y televisión, los clientes pueden degustar bebidas frías o calientes, crepes, ensaladas, platos de ave y carne y especialidades locales, pero la principal atracción son los helados, de sabores muy variados. El establecimiento también ofrece fórmulas de desayuno con zumos de fruta fresca y buena bollería. Servicio mediocre.

Uno de los mercados más concurridos de la región. El Gran Mercado de Lomé es un edificio de dos plantas que data de 1967. Aquí se puede encontrar casi cualquier cosa que se pueda comprar o vender. La primera planta es el bastión de los nana-benz, que venden taparrabos y telas para confeccionar ropa. El piso de arriba es un auténtico revoltijo de vajillas, herramientas y artesanía recuperada. No dude en mezclarse en este ambiente realmente único.

Una parte del Grand Marché se trasladó al norte de la ciudad para descongestionar el centro. La operación no fue tan exitosa como se esperaba, ya que los hábitos siguen siendo muy vivos. Sin embargo, con el tiempo, este nuevo mercado tiende a competir con el mítico mercado de Assigamé. Se concentra principalmente en el mercado de segunda mano. Aquí se venden artículos de segunda mano a precios asequibles. También puede encontrar todo tipo de productos, desde alimentos hasta cosméticos.

Desde su apertura, este establecimiento se ha ganado la fidelidad de clientes locales y expatriados con sus excelentes pasteles y viennoiseries francesas. El comedor climatizado tiene una decoración minimalista pero moderna. Además del desayuno, también se puede comer una ensalada fresca, una hamburguesa, una pizza o un plato más contundente como el arroz al curry con gambas. Todo se elabora en el propio local, y se puede saborear. El pan también es muy bueno. Además, la acogida es agradable y el servicio rápido.