Ruán, capital de Normandía y del Sena Marítimo, ha conservado un patrimonio excepcional, toda una invitación a pasear por su centro histórico, totalmente dedicado a los peatones, como le mostrará un guía turístico de Ruán. Paseando por sus animadas calles, descubrirá casas con entramado de madera y tesoros arquitectónicos que han desafiado a los siglos: maravillas góticas como la catedral de Notre-Dame, laiglesia abacial de Saint-Ouen, la iglesia de Saint-Maclou y el Palacio de Justicia, y joyas renacentistas como el Gros-Horloge, el Aître Saint-Maclou y el Hôtel de Bourgtheroulde. En el recodo de las calles, en los museos y monumentos, sus célebres personajes saldrán a su encuentro: Ricardo Corazón de León, Juana de Arco, Pierre Corneille o Gustave Flaubert. Y si sube al panorama de la Côte Sainte-Catherine, podrá admirar la ciudad acurrucada en torno a su río, rodeada de verdes colinas. Paseando por el Robec, los molinos y el patrimonio industrial le hablarán del largo pasado textil de esta ciudad cuyo símbolo es la oveja. Otra particularidad de Ruán es su gran puerto, uno de los más activos de Europa, que une Le Havre con París siguiendo los meandros del Sena. Eventos festivos, festivales de cine y grandes acontecimientos deportivos (hockey, baloncesto y rugby son algunos de los escaparates de la ciudad) jalonan la vida de una ciudad donde el arte de vivir no es una palabra vacía.