MEZQUITA BOLO HAUZ
Después de cruzar la vasta y desierta plaza del Registán hacia el oeste, los árboles que rodean el estanque y el alminar de la mezquita Bolo Hauz la convierten en un refugio de sombra muy agradable. Los escalones de mármol descienden hacia las oscuras pero refrescantes aguas del estanque construido en el siglo XVI que dio nombre a la mezquita (hauz). El iwán está colocado sobre veinte pilares de madera de Karagatch, cuya inusual finura otorga al conjunto un aspecto aéreo. La decoración de las cajas de madera del techo, así como las estalactitas pintadas en la parte superior de los finos pilares, hacen de esta mezquita una de las más bellas de la ciudad. Cuando el emir iba a la oración del viernes se colocaban alfombras en el suelo desde la puerta del Arq hasta la entrada de la mezquita. El edificio data de 1712 pero el iwán, de doce metros de altura —por lo que es uno de los más altos de Asia Central—, fue añadido en el siglo XIX, y el minarete es de 1917. Este último ha envejecido mal, inclinándose cada vez más como una pequeña torre de Pisa; ahora está reforzado por un marco de madera unido al suelo por cadenas.